Un breve recuento para saber cómo funcionan mejor las baterías de nuestros dispositivos y qué podemos hacer para que su vida útil y el tiempo entre recargas se maximice.

Para todos los que ya somos usuarios permanentes de los móviles ningún tema nos preocupa tanto como el grado de libertad y autonomía que nos brinda la máquina sin tener que recargar la batería. Todos los días asistimos impasibles ante las novedades que este mundo tecnológico nos depara, donde la velocidad de procesamiento, memorias y programas dejan siempre de lado el tema de las baterías y su evolución tecnológica, trayéndonos generalmente aplicaciones y máquinas más exigentes que nos limitan todos los días más nuestro grado de autonomía a las recargas.

Las útimas baterías disponibles en el mercado han eliminado el fastidioso efecto memoria que nos obligaba a regímenes de carga y descarga completas en desmedro de su tiempo de servicio y eficiencia en el desempeño de su función, entregándonos ahora baterías inteligentes que han incorporado formas de asistir al usuario y minimizar el tiempo de recarga maximizando su utilización.

Como norma, la experiencia de los usuarios y los reportes técnicos han establecido que las baterías de polímero de ión litio deben mantenerse con cargas que garanticen niveles entre el 85% y 35% aproximadamente, con cargas superficiales de 2h a 4h (dependiendo de la edad de la batería) a efecto de garantizar que no habrá descargas completas que limiten la vida útil, ya que éstas vienen programadas para ser usadas dentro de ciclos que van entre las 1000 y 1200 cargas pico a pico lo que quiere decir, en términos prácticos, que entre menos las descarguemos totalmente más tiempo van a durar, sin perder de vista otros factores externos a considerar como el tipo de ambiente en donde se use y la edad misma de las baterías.

Por todo eso es que se impone un uso racional del recurso para darle más vida útil y tiempo de servicio a nuestras máquinas y es ahí en donde con nuestra conducta podremos ayudar a que todo el proceso mejore a nuestro favor.

Anteriormente en otros sitios web donde escribo se había  tocado el tema recomendando una serie de opciones que pueden tenerse en cuenta para lograr lo propuesto y que ahora, a nivel de artículo y no de comentario, quiero compartir con ustedes para que quede como referencia para su fácil consulta a futuro.

Seguramente para algunas personas algunos tips propuestos adelante parecerán llevados al extremo de las costumbres y los gustos, pero tengan la seguridad que la recompensa vendrá con el tiempo cuando descubran, como yo lo he hecho, que todo esto funciona.

Sin más preámbulo estas son las 30 formas que tienen a su disposición para alargar y mejorar el desempeño de sus baterías: